Gattesco Gonzalo

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Gonzalo Alfredo Gattesco (El Gato)
Imposible no recordar su apellido si uno le prestó atención al fútbol cordobés de fines de siglo pasado. Gattesco…Gattesco, suena a volante derecho de largo recorrido y breve participación. Huele a titularidad no asegurada. Sabe a desaparecido en acción. El simple hecho de mencionarlo, además, trae inevitablemente recuerdos borrosos de Lillo, Roth, Rami y Pronetto. Pero…¿Quién es y qué pasó con Gattesco?

Gonzalito fue un mediocampista sin suerte que atravesó como pudo una trayectoria minada de inconvenientes, algunos poco frecuentes. Debutó con Talleres de Córdoba en el Nacional B (1997/98) pero sin lugar tuvo que marcharse a Godoy Cruz de Mendoza (1998/99), donde se asoció con el Polaco Dobrik y Lentz. Al terminar el campeonato de la B Nacional, encaró una nueva pretemporada en el Tomba pero a último momento adujo que no podía quedarse en tierras mendocinas porque tenía un familiar enfermo y se volvió a la Docta. El técnico Trullet no le creyó y lo acusó de mentiroso.

Ya en sus pagos, firmó para Racing de Nueva Italia (1999/2000) y tuvo el honor de entrenar con el Pelado Dertycia. También se destacó haciendo 5 goles que rápidamente despertaron el interés del dueño de su pase, Talleres. Y hacia allí partió.

El 18 de junio del 2000 hizo su estreno en la máxima categoría ante River (derrota 2 a 0), ingresando por Andrés Cabrera a los 10 minutos del segundo tiempo. Una semana más tarde y en la función de marcador de punta por derecha, fue titular en la caída 3 a 1 frente a Newell’s. Por cábala no lo iban a poner jamás, eso estaba claro.

Al finalizar la temporada, el Gato fue pretendido nuevamente por Racing y ante una un eventual tironeo entre dirigentes se puso firme y anunció que sólo se quedaba en la T si tenía chances concretas de jugar. ¿Resultado? Continuó en el plantel de Primera División y se sacó las ganas de lograr una victoria en su tercer y último match: 3 a 0 contra el Racing del Pampa Jorge.

Siguió perteneciendo al equipo pero no volvió a aparecer en los diarios hasta que en 2002 se conoció la noticia más dura. Los médicos le detectaron una desviación en la columna que le impedía practicar el fútbol profesionalmente (había tenido también una rotura de menisco externo en la rodilla izquierda).
Ante esa triste realidad y con tan sólo 24 años, Gattesco tuvo que colgar los botines: «Era muy riesgoso seguir intentando jugar, ya que podría esforzar mucho la espalda. Me operé de hernia de disco cuando era chico, por problemas en la columna vertebral. Los médicos me dijeron que era muy riesgosa otra cirugía, ya que no sería cuestión de la operación, sino de suerte. Entonces decidí retirarme«, declaró al Diario Olé.

El próximo paso fue aceptar una propuesta de Mario Ballarino, quien le ofreció trabajar en las inferiores del club. Y allí estuvo algunos meses dirigiendo con éxito a la Quinta y Sexta División, hasta que se cansó de que no le pagaran (todavía tenía contrato de jugador) y se alejó de Talleres.

9 respuestas a “Gattesco Gonzalo

  1. Qué lástima!!!

    Si hubiera continuado con su carrera, por ahi en algún momento se podría haber transformado en el Genaro Gatusso del subdesarrollo.

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  2. Un caso de muy mala suerte. Retirarse tan pronto es raro, pero en este caso por motivos de salud parecía inevitable. Me recuerda a la historia de Álvaro Benito, que debutó en el Real Madrid, apuntaba muy buenas maneras, y un gravísima lesión truncó su prometedora carrera. Ánimo a toda esta gente. Un saludo.

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  3. No tan perro el gato… Mi tio y mi primo, ambos… compañeros de colegio en el Santo Tomas de Diego Gattesco y el «Leo» Torres, aquel que jugara en belgallina y fuera campeon con el Racing Club de Avellaneda en el recordado titulo del 2001… Diego Gattesco, hermano de Gonzalo, y jugador de la «Canchita» equipo que fundo mi papa para jugar en la «UCFA»… Cuantas coincidencias… de ahi conozco, a Diego y gracias a el personalmente a Gonzalo… puedo decirlo, un muy buen tipo… tuvo mala suerte…

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  4. Ponía en la cancha como si hubiera sido de Belgrano. Una pérdida con el retiro, otra lástima las camisetas que usó, salvo la del Tomba, donde debe haber hecho, después de la de este año, la mejor campaña de la historia.
    Tan buen jugador como tipo. Muy querido.

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