Pernía Gastón

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Gastón Alberto Pernía

Los Pernía son como los Gatti, cuando pensás que los conocés a todos siempre aparece uno nuevo que agiganta el mito. En este caso, vamos a repasar la trunca carrera de otro hijo futbolista de aquel recio marcador de punta que tuvo Boca en los 70’s. No nos referimos a Mariano ni a Leonel, sino al menos exitoso de los hermanos deportistas: Gastón.

Nació en Tandil el día de los inocentes de 1973 y por lo tanto, nadie se lo tomó en serio. Su viejo, tal vez para incentivarle la práctica del fútbol como hizo con los demás, lo llevó a Boca Juniors, donde Silvio Marzolini le bajó el pulgar. «Temía que pensaran que estuviera allí por amistad, aunque nosotros nunca fuimos amigos. Ver a Gastón con la camiseta de Boca sigue siendo un sueño«, decía el Tano en 1993.

Por entonces, su hijo actuaba como lateral izquierdo en la Reserva de San Lorenzo de Almagro, donde ya habían planeado desprenderse de él. De hecho, ese mismo año lo cedieron al Deportivo Armenio gracias al famoso convenio que incluyó una camiseta con el escudo de ambas instituciones.

Mientras tanto, su padre insistía: «Técnicamente es un jugador de características parecidas a las mías, no es un exquisito. Es muy disciplinado y le gusta mucho trabajar en la parte física; además, se cuida como debe para poder rendir«. Vicente, se notaba, quería lo mejor para su pibe.

Lo raro es que después de muchos años de pocas certezas sobre su paradero, a comienzos de 2001 reapareció de forma brillante. Estaba en su casa de Tandil, medio aburrido, cuando se enteró que Boca estaba entrenando en la ciudad. Y bueno, no le costaba nada, así que se mandó.

El 22 de enero de ese año jugó para el Xeneize un amistoso ante Gimnasia La Plata. El equipo dirigido por Bianchi ganó 1 a 0 y alineó a Muñoz; Sergio Páez, Joel Barbosa, Gastón Pernía e Imboden; Marchant, Pinto, Javier Villarreal y La Paglia; Adrián Guillermo y Esteban Herrera. Equipazo.

El sueño se le terminó pronto, claro. Y entonces se dedicó a ganar dólares en Estados Unidos. ¿Con el fútbol? No, con el Indoor Soccer. Y jugando con las camisetas del Chicago Storm, Orlando Sharks o directamente entrenando chicos de una escuelita de Florida ha sabido sobrevivir. Lo que no le vamos a permitir son estas declaraciones sobre la actividad que practica. La verdad, nos parecen un exceso:

 

«En este juego si te desconcentras, si pestañeas un poquito despacio, te hacen un gol…Inclusive las paredes son un jugador extra que hay que saber usarlo, es un juego que lleva adaptación…Yo creo que es el mejor deporte del mundo».

 

19 respuestas a “Pernía Gastón

  1. Hay un tema que puede parecer una boludez pero no lo es. Por el Nuevo Gasometro estampado en la camiseta, calculo que la foto debe ser de comienzos de los 90s. Para esa epoca todos los equipos usaban pantalones cortos tipos bermudas. Pero a este Pernia le tiraron unos minoshots. Otra posibilidad es que el flaco sea tremendamente desproporcionado (cosa factible por lo alargada de la cabeza y en especial del cuello).

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