Damián Alejandro Mancini
La vida de muchos futbolístas suele ser efímera. Pero algunos hacen hasta lo imposible para prolongarla. Éste singular defensor de la cantera velezana sabía que no tenía mucha vida útil en el club de Liniers, pero intentó de todos modos jugar al fútbol con algo de trascendencia. No disputó partidos oficiales, pero se dió el lujo de debutar ante Boca, por la ronda de perdedores de la Copa Centenario de 1993. Aquella mañana en Caballito, Mancini compartió la defensa con Leo Ramos, Trotta y Montefiore. Vélez perdió 1 a 0, pero también perdió la presencia del juvenil marcador, que prefirió, al año siguiente, buscar nuevos horizontes.
Después pasó por Ferrocarril Midland (1996 a 1998) y Deportivo Merlo (1998-2000).
Juan Pordiosero
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