En los últimos meses, alcanzó gran popularidad el grupo empresarial Generación Zoe. Además de ser sponsor de Chacarita e invertir en Caruso Lombardi Deportivo Español, apostaron fuerte por el fútbol en Villa María, creando su propia escuadra: el Zoe Atletic Club.
Obviamente, la cosa terminó mal. En esa institución trabajaron Rodolfo y Diego Graieb, aunque el principal estafado fue Néstor Apuzzo, quien planea sumarse a las demandas contra la empresa.
“Cositorto me debe plata”, declaró el ex DT de Huracán, que había sido tentado para entrenar al equipo. “Sólo nos pagaron el hotel y algunos gastos cuando fuimos por primera vez en diciembre, pero nada más. Después no cobramos ni una sola moneda, ni la nafta de la camioneta ni los viáticos”. Además, agregó que “a varios chicos que son de Buenos Aires hasta los llevé en mi auto y les pagué la comida, que es lo mínimo que podía hacer por ellos. Después el club no me devolvió absolutamente nada”.

– Entre las noticias lindas (?), cabe destacar que hay futbolistas a los que no los detiene la edad. Y siguen pateando una pelota por pura pasión. A los mencionados en el último reporte, se suman Matías Gigli (45 años, en Unión de Arroyo Seco), Javier Villarreal (43 años, en Deportivo Norte de Alta Gracia), Hilario Navarro (41 años, Defensores de Vilelas) y Rubén Tito Ramírez (39 años, en Porteña Asociación).

– Un caso especial es el de Adrián Bastía, que además de raspar en el mediocampo de Belgrano de Serodino, también es el presidente del club. El Polaco, a los 43 años, mantiene las ganas… y la cabellera.

– Otro que sigue jugando es Germán Ré. Aunque, además de ponerse cada fin de semana la camiseta de Unión de Totoras, también mantiene una actividad paralela: reparto y venta de huevos. «Tengo siete mil gallinas. No es difícil el trabajo, me distraigo. Me ayudó mucho en la pandemia y para afrontar el retiro del fútbol. Estoy en el campo y me entretengo porque siempre hay algo para hacer», comentó el Colo, que ya sopló 40 velitas.
– La misma edad acusa Cesar Pereyra, que ilusiona a los hinchas de Douglas Haig. El equipo entrenado por Gabriel Nasta tuvo un gran arranque en el Torneo Federal A. El Picante ya contribuye con goles. Y con su clásico festejo.
– Por último, un reconocimiento para alguien que se alejó del fútbol y parece haber encontrado su vocación: Sergio Hipperdinger. El ex delantero de Quilmes se dedica desde hace un tiempo al poker profesional. En su último torneo cumplió una buena performance, luciendo la camiseta del club de sus amores. Por suerte para él, en esa competencia no había descensos.