Las primeras semanas de 2007 fueron agitadísimas en el siempre conturbado mundo Boca. Después de perder el tricampeonato de manera insólita en las últimas fechas del torneo Apertura 2006, y tras la salida de Ricardo La Volpe, Miguel Ángel Russo asumió con un objetivo claro: ganar la Copa Libertadores.
Mientras soñaba con la vuelta de Juan Román Riquelme desde Europa, el cuadro de la Ribera buscaba otras alternativas más cercanas. Uno de los tantos nombres a los que apuntaba la dirigencia del Xeneize era el de Leandro Gracián, que estaba en el Monterrey de México. Descartada esa posibilidad, surgió la chance del brasileño Manoel de Morais Amorim, más conocido como Morais.
Pieza fundamental de la fantástica Generación 84 de Vasco da Gama (integrada también por Francisco Alberoni, de efímero paso por Independiente en 2004), que entre 1997 y 2001 estuvo casi 130 partidos sin perder, Morais irrumpió en la primera del cruzmaltino en 2002, aunque tardaría un tiempo en adaptarse. Tras una breve estadía en el Atlético Paranaense (2004/05), regresó a Río de Janeiro y en 2006 fue uno de los puntos altos del equipo que terminó a un paso de la zona de clasificación a la Libertadores.
Enganche zurdo, talentoso y con mucho futuro por delante, Morais, de 22 años, ya despertaba el interés de algunos clubes europeos como el Olympiakos de Grecia o el Red Bull Salzburg de Austria, a los que les daba la espalda. Esperaba algo más importante y tenía con qué: en 2006 había sido convocado por Dunga a la selección, aunque no salió del banco en el amistoso contra Noruega.
Su pase estaba tasado en 9 millones de dólares, pero el trámite también implicaba sentarse a negociar con uno de los dirigentes más turbios del fútbol sudamericano, Eurico Miranda. «Boca es un grande del fútbol mundial y va a disputar la Libertadores. Está claro que no puedo descartar esa posibilidad», decía Morais en declaraciones a la radio Globo. En São Januário se hacían los desentendidos: «Vamos a charlar. Todo jugador tiene su precio. Pero tiene que ser un buen negocio para todos. Ellos (por las autoridades de Boca) tienen que venir con un camión lleno de dinero. Para llevar a Morais de Vasco van a tener que transpirar bastante. Si ellos están realmente interesados, deben responder con mucho dinero», arremetía José Luiz Moreira, el vice brasileño
¿Y Russo? «Morais o Gracián son dos cosas distintas. A Gracián hemos intentado conseguirlo y lo otro es una posibilidad que surgió imprevistamente. Uno busca información de gente amiga que está en Brasil y te van diciendo. Son todas situaciones para evaluar. Siempre es difícil lo desconocido. A Gracián ya lo conocíamos, cualquier otra posibilidad que no sea Gracián es toda una apuesta. Son situaciones de negociaciones difíciles», tiraba el hombre de las sonrisa perfecta. Son decisiones.
Finalmente, Morais continuó en Vasco da Gama y luego pasó por un sinfín de clubes, siempre perseguido por las lesiones y flojas actuaciones. Hoy juega en el Brasiliense de la Serie D. Lo de Boca es historia conocida: una semana después selló el regreso de Juan Román Riquelme, que la rompió en la Libertadores, y a mitad de año abrochó el pase de Leandro Gracián, que, bueno, mejor no recordarlo…
En Una Baldosa 
El tanito Glaciar pintaba para crack en sus inicios en Vélez. Me gustaría saber qué pasa por la cabeza de esos jugadores que surgen como grandes promesas y terminan profundo en el under (escobillón Guillermo, Billy Rodas…).
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A Billy Rodas con lo cabeza de termo que demostró ser, te puedo apostar que le importa un carajo que le paguen por jugar en la b de Zambia o en el Real Madrid. Mientras pueda seguir robando no le importa nada
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Salieron de Guatemala y se metieron en Guatepeor…
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No recuerdo a Morais así que menos recuerdo su mal pase en lo que a mi respecta todo esto pudo haber sido inventado porque de hecho dentro de 5′ ya me voy a olvidar de nuevo de Morais
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Gracian un tempano made in Liniers Co. Pero si de tipos sin ganas de transpirar y/o aportar algo hablamos (ya lo he mencinado varoas veces…?) Damian «pichi» Escudero es lo mas gelido que he visto deambular en ese rectangulo deportivo ubicado a pasos de caminitouuu. Tambien made in Liniers Co.
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No me acordaba de este paquete. Gracias a Dios, JRR volvió y fue figura excluyente en esa Copa (y si el Villareal no se ponía en ortiba, me atrevo a decir que al Milan le ganábamos). Pero bueno, así se dieron las cosas.
No me quiero imaginar que hubiese pasado si en vez de Riquelme venía el carioca falopa este. Con la llegada del Tanito Glaciar me ilusione, pero se trató de un espejismo tan grande como el montón de hielo que acumulaba en su pecho.
Parrafo aparte para estos brasileños que ilusionan y terminan siendo unos chascos barbaros (remember Charles, bombon Bahiano, Jorginho, Luiz Alberto).
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La excepción a la regla: Iarley
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Baldoserinho(?) de acá a Río de Janeiro…
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Que cancha de mierda Sao Januario, que equipo de mierda bbbbbbbbasco
todo mal
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Estos brazucas siempre se hacen los dificiles para venir acá.. encima los pocos que vinieron dieron lástima salvo Iarley
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No te olvides del mejor: Paulo Silas que pensamos que nos habían vendido un fantasma por error y era tremendo como jugaba.
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Sí, me olvidé de aclarar que me refería a la década del 2000. Silas fue un fenómeno
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¿Morais, Vasco Da Gama y Gracian en el mismo post? Brrrr con razon el frio OLA POLAR ETERNA (?) ¿Por que sera que a los Argentinos siempre nos venden a un Brazuca vendido como el nuevo Adriano, Ronaldo, Ronaldinho, Robinho o Kaka y terminan siendo mas amargos y fantasmas que el fantasma de la B y Pichi Erbes juntos? Mencion aparte para Pichi Escudero nunca vi un jugador tan gelido en mi vida a este y un par mas pueden ser considerados como heroes nacionales de la Antartida junto a Romero, Di Maria, Gago, Biglia, Masch* logicamente Erbes, Gracian, Stracua.. Stracualur… El ultra tronco que esta afanando en el fulbo hace mas de 7 años y el chilote borracho de Vidal.
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