Con sus manos había eliminado a Inglaterra en Francia ’98 y estaba considerado como uno de los mejores arqueros del Mundo. Figura en el Mallorca español, Carlos Ángel Roa fue tentado a comienzos de 1999 por el Manchester United, que ofertó 10 millones de dólares por su pase y además le ofreció un jugoso contrato. Muchos, al enterarse de las cifras que se manejaban, dieron el pase por hecho. Pero el argentino, que por aquel entonces tenía 29 años, rechazó los billetes y se retiró por cuestiones religiosas (entre otras cosas, no podía jugar los sábados).
Permaneció un año alejado de la actividad, haciendo tareas de caridad como miembro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día y en abril de 2000 anunció su vuelta al fútbol. Siguió actuando en España e incluso regresó al país para ponerse el buzo de Olimpo, aunque ya no volvería a tener el mismo nivel que lo llevó a estar en la mira del Manchester.
En Una Baldosa 
Que boludo!!! le durò poco su amor a la religiòn y se diò cuenta que se perdìa una fortuna!!!
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Lo de las religiones es increible! El ser humano es tan moldeable…
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Hoy es ayudante de campo del loco Gorostidi en Ben Hur de Rafaela, que tiene convenio de filial de Colón (Roa es tatengue confeso).
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Uuuhhhh, la guita que se perdió, recuerdo que iba a ser el pase mas caro de la historia de un arquero en ese momento, después vino lo de Buffon y sus 55 palitos que hoy es casi imposible de superar para un arquero.
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qué forrez inentendible, qué tipo que me parece taaaan pelotudo que es Roa
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me parece perfecto, puso sus principios y su cultura por encima del dinero. muchos giles que comentan acá no son capaces de entenderlo, debido a que hoy el sistema nos enseña que el dinero está por encima de todo. aún así les digo, a este muchacho roa le ha ido mucho mejor que a ustedes, tanto en lo económico como en lo laboral, así que de boludo tiene poco.
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No solo se perdio la $ y jugar en el Manchester, sino que despues del Mundial 98 ¿quien le habria discutido la titularidad en el arco de la Seleccion???. No era un mal arquero, tampoco fue Lev Yashin, pero tampoco lo eran Burgos, Bonano y muchisimo menos Pablo Cavallero, ni hablar del infladisimo por la prensa: Roberto Abbondanzieri.
En fin, exitos Sergio Romero.
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Si no se hubiera retirado ese año, Roa hubiera sido el arquero de la selección en 2002 y, probablemente, en 2006, además del sucesor de Schemichel en el Manchester United (Barthez terminó ocupando esa plaza). Casi nada. Todo bien con las convicciones del muchacho, pero fue un boludo. Él mismo lo asumió (implícitamente) cuando revirtió su decisión y regresó al Mallorca, ya sin suerte porque no pudo recuperar el nivel de antaño y permaneció en las sombras hasta su retiro definitivo.
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