La temporada de Huracán de Tres Arroyos en Primera fue un caldo de cultivo inigualable para este sitio. Nos nutrió de jugadores y también de rarezas para varias secciones. Una de ellas, estuvo relacionada con una transferencia múltiple que, a poco de cerrarse, se terminó rompiendo.
Todo empezó a comienzos de 2005, con un interés de la gente de Gimnasia y Esgrima de La Plata por contratar a Gabriel González, delantero sensación del Globito en el Apertura 2004. Los tresarroyenses, necesitados del dinero pero también de jugadores para pelear por la permanencia, pidieron a cambio un par de hombres con experiencia en la división. Los dirigentes del Lobo, aprovechando que tenía un par de nombres fuera de los planes del técnico Ischia, ofrecieron a Federico Turienzo y a Martín Pautasso. Sus pares de Huracán aceptaron la oferta, acordando la firma del contrato para el 6 de enero de ese año. Sin embargo, a último momento surgió una complicación. Pautasso, enojado, salió a decir «a préstamo no voy a ningún lado. Porque prefiero quedarme seis meses en Gimnasia aunque no me tengan en cuenta y después tendría el pase en mi poder«. A continuación, fue Turienzo el que se negó a pasar prestado. Y por último Choy González, otro que había aparecido como alternativa, se bajó del trueque porque los Mens Sana aún le adeudaban plata a Cerro, su club de orígen.
A todo eso, el Bibi González se perdió la oportunidad de jugar en un equipo tradicionalmente de Primera y dos años más tarde descendería al torneo Argentino A.

Juan Pordiosero